Me encanta escribir.
Me cuesta mucho guardar mis demonios interiores, eso llamado mente, conciencia o quién sabe que, lo cual me hace pensar y pensar, no es sino un cruel monstruo que se alimenta de mí. Es por ello que escribiendo siento que parte de él se escapa y sale al exterior, dejándome un poco más libre de su carga.
Este es el primer blog que escribo, y se lo dedicó a ellas. Les solemos llamar Ana y Mia y podría decirse que son dos de estas diablas que habitan mi mente y mi cuerpo.
Doy por hecho que si estás visitando este blog sabrás de quién se tratan y conoceras su existencia y lo duro que es ser "amiga" suya.
No sabría decir en este momento si yo las elejí o fueron ellas a mí, lo que sé es que han marcado un antes y un después en mi forma de actuar, de ver el mundo y, sobretodo de verme a mí misma.
Quizás no sé de quién fue el paso, pero si sé porque lo hice, aunque sí se la mayor parte de las causas por las que llegue a conocerlas..
Pero bueno, ya hablaré de ello, pues esta es mi primera entrada, así que comenzaré por presentarme un poco.
Me pueden llamar princesa, pues lo soy.
Llevo aunque me cueste mucho, mi corona bien alta.
No soy la típica quinceañera que busca tips para estar más delgada y consejitos para saber como vomitar, aunque puedo decir que las comprendo.
Tengo 23 años y sé lo que supone luchar por ésto y seguir nuestro estilo de vida, asi que, de todas formas, intentaré ir añadiendo aquí aquello que me ha ido sirviendo durante el camino, la información que conozca y que encuentre por ahí, e intentare ayudar y escuchar a aquellas pequeñas princesas que pasen por aquí, pues yo sin el apoyo de las demás quizás no hubiera seguido adelante, pues gracias a todas me siento un poco menos sola.
Princesa x siempre
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